El tratamiento del nuevo Código de Ordenamiento Urbano (COU) genera expectativas en Yerba Buena. La iniciativa está siendo analizada en comisiones del Concejo Deliberante para tratar de llegar al recinto cuanto antes, aunque la oposición planteó la necesidad de extender el estudio. Pero en el Departamento Ejecutivo Municipal sostienen que es necesario que se trate pronto la iniciativa para reemplazar una ordenanza de 30 años de antigüedad (N°613). “Hay un desarrollo del privado que hace que sea imperioso y hasta urgente un cambio de la normativa”, aseguró el intendente, Pablo Macchiarola.
El jefe municipal hizo hincapié en el informe que brindó el Observatorio Profesional del Colegio de Arquitectos de Tucumán (Opcat), que da cuenta de que Yerba Buena concentra la mayor obra privada de la provincia. Esa alta concentración reflejó una “presión urbanística”, lo que sugiere la necesidad de reforzar las herramientas de planificación urbana. En ese sentido, Macchiarola opinó que el Código vigente no satisface las necesidades actuales. “Un problema que Yerba Buena no tenía son las viviendas. Los hijos y nietos (de vecinos) no tienen dónde vivir en la ciudad por falta de viviendas”, aseguró a LA GACETA. Señaló que esa problemática hace que los precios de las viviendas, los terrenos y los alquileres sean muy elevados.
“Antes no había bancos y había un solo supermercado. Era una ciudad dormitorio. Hoy tenemos todos los servicios, pero nos están faltando viviendas. El nuevo Código apunta a eso en detrimento de los que quieren hacer locales comerciales. Tenemos todos los rubros y servicios comerciales”, insistió el intendente.
Yerba Buena: con críticas, piden aplazar el debate del nuevo Código de Ordenamiento UrbanoMacchiarola remarcó que el proyecto de ordenanza que se envió al Concejo demandó varios años de gestación, de trabajo de profesionales y de consultas plurales. Puso énfasis en que la reglamentación que se pretende sancionar fomentará que los desarrolladores construyan más viviendas que locales comerciales dado que les resultaría más rentable.
Uno de los lineamientos estratégicos para el ordenamiento urbano para los próximos 25 años es “preservar el carácter predominantemente residencial de la ciudad, fomentando una mayor diversidad de viviendas de diferentes dimensiones y tipologías en función de las nuevas demandas sociales”.
El intendente de Yerba Buena advirtió también que es necesario tener una normativa clara que permita proteger el casco viejo de la ciudad, por lo que optaron por ampliar dicho sector. Indicó que hoy no existe ninguna normativa que impida derribar casas en esa zona para edificar locales comerciales. “No hay ninguna normativa que diga que está prohibido”, mencionó.
“La excepción era regla”
El COU que se propone para los próximos 25 años (contemplando revisiones cada lustro) apunta también a ponerle un límite a los desarrollos inmobiliarios conocidos como barrios privados, los cuales proliferaron en la última década, incomunicando y fragmentando la “Ciudad Jardín”. Se planteó poner un límite de 250 metros para ese tipo de proyectos para asegurar la conectividad de la ciudad y evitar barreras físicas enormes como ocurre en la actualidad. Se consignó que si una urbanización especial excede esa longitud, se deben abrir calles públicas intermedias y cederlas al municipio, dotándolas de infraestructura.
Nuevo Código Urbano, en debate: “El crecimiento de Yerba Buena será ordenado y con más espacios verdes”Otro cambio significativo que se plasmó en la propuesta del DEM es que los conjuntos inmobiliarios deberán “abrir lotes hacia la vía pública a fin de evitar frentes cerrados continuos que generen condiciones urbanas no convenientes”. De esta manera, el Municipio busca dar vida a las calles y evitar que haya nuevos “paredones muertos”.
Macchiarola afirmó que el vecino de Yerba Buena quiere una ciudad ordenada, con verde, tranquila y deportiva. Remarcó que era necesario ponerle un límite a las excepciones que otorgaba el Concejo Deliberante. “La excepción se había vuelto regla. Hay que poner blanco sobre negro, para poner claridad. Yerba Buena es una ciudad completamente distinta a la de hace 30 años; una ciudad nueva en la misma ciudad. Se duplicó en habitantes. Mal haríamos en no aggiornar el código”, manifestó.